Situado en la pintoresca región montañosa de Akaishi, Japón, el Nishiyama Onsen Keiunkan no solo es el hotel en funcionamiento más antiguo del mundo, sino también un refugio de tranquilidad y tradición.

Con sus aguas termales naturales y su exquisita gastronomía, este ryokan ofrece una experiencia única que combina historia, confort y hospitalidad. El Nishiyama Onsen Keiunkan, reconocido por el Libro Guinness de los Récords como el hotel más antiguo del mundo, ha estado en funcionamiento desde el año 705, lo que equivale a 1.318 años de historia.

Ubicado a aproximadamente dos horas del icónico monte Fuji, este establecimiento ha sido administrado por la misma familia durante 52 generaciones, lo que refleja un legado de dedicación y compromiso con la hospitalidad.

Ek Ryokan de 5 estrellas Nishiyama Onsen Keiunkan se encuentra en Hayakawa y cuenta con más de 1.300 años de historia,  aguas termales . Se encuentra en un valle rodeado de naturaleza y cuenta con corrientes de aguas termales en todas las habitaciones, incluidas las duchas. Los huéspedes podrán disfrutar de carne Koshu en el tradicional ryokan japonés, así como de WiFi gratis en todas las instalaciones y un servicio de traslado desde la estación de Minobu bajo reserva previa.

El personal que trabaja allí es cálido y cortés, ofreciendo un espíritu de servicio que nace de un deseo compartido de proteger la posada con un inquebrantable

Las habitaciones del ryokan Nishiyama Onsen Keiunkan cuentan con hervidor eléctrico, nevera, TV de pantalla plana y baño con secador de pelo, cepillo de dientes y artículos de aseo gratuitos.

El edificio de cuatro plantas combina elementos contemporáneos de acero con la calidez de la madera, creando un ambiente acogedor y elegante.  y algunas de las habitaciones ofrecen bañeras de hidromasaje al aire libre con impresionantes vistas al monte Fuji, al río y a los exuberantes paisajes que rodean el hotel.

La experiencia en el Nishiyama Onsen Keiunkan se complementa con la excepcional oferta gastronómica de su restaurante, que presenta un menú degustación en formato ‘kaiseki’.

Este estilo culinario destaca por su atención al detalle y el uso de ingredientes locales frescos, incluyendo la famosa carne koshu, típica de la región de Yamanashi. Cada plato es una obra maestra que refleja la rica cultura gastronómica japonesa.

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El personal del hotel se distingue por su calidez y cortesía, ofreciendo un servicio que emana de un profundo deseo de preservar la esencia de esta posada milenaria. Su compromiso con la hospitalidad ha atraído a viajeros de todo el mundo, quienes buscan no solo un lugar donde hospedarse, sino una experiencia que los conecte con la historia y la cultura de Japón.

En resumen, el Nishiyama Onsen Keiunkan no es solo un hotel; es un viaje al pasado que invita a los huéspedes a sumergirse en la tradición japonesa, disfrutar de la belleza natural y experimentar la auténtica hospitalidad que ha perdurado a lo largo de los siglos.