- Este lunes 20 de enero, Donald Trump tomará posesión como presidente de Estados Unidos, convirtiéndose en el segundo mandatario en la historia del país en cumplir dos mandatos no consecutivos, tras Grover Cleveland en el siglo XIX.
La ceremonia oficial está programada para las 12:00 p.m. (hora del este), de acuerdo con lo establecido por la 20.ª Enmienda de la Constitución de los Estados Unidos.
“Esta enmienda, ratificada el 23 de enero de 1933, se centra principalmente en la reducción del tiempo entre las elecciones y el inicio de los mandatos del presidente, el vicepresidente y los miembros del Congreso”, explica Rafael Peñalver, abogado constitucionalista, en declaraciones publicadas por la Voz de América.
El evento será supervisado por el Comité Conjunto del Congreso sobre Ceremonias Inaugurales (JCCIC, por sus siglas en inglés), encargado de planificar y coordinar las ceremonias de investidura presidencial en el país.
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Como es tradición, la ceremonia se llevará a cabo en las escalinatas del Capitolio, donde el Donald Trump jurará su cargo con la mano sobre la Biblia, seguido de su discurso inaugural, esta es la segunda vez que realiza esta ceremonia.
Nuevas Perspectivas en las Políticas Migratorias bajo la Administración Trump
El regreso de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos inaugura un nuevo capítulo en las políticas migratorias del país, caracterizado por la promesa de un enfoque aún más restrictivo. Las declaraciones del mandatario indican un endurecimiento en los controles fronterizos, un incremento en las deportaciones y cambios significativos en los programas de visas.
Joaquín Rosales, abogado especializado en inmigración, señala que, a pesar de este panorama adverso, existen alternativas viables para quienes buscan una vía legal hacia la regularización, especialmente a través del emprendimiento y programas específicos como las visas O-1 y E-2.
Rosales advierte que las visas tradicionales, como la H-1B y las de reunificación familiar, enfrentarán mayores obstáculos. Se anticipa que los controles serán más rigurosos, los tiempos de espera se prolongarán y los costos asociados a estos procesos seguirán en aumento.
Asimismo, se prevé que programas como DACA y TPS, que han proporcionado protección temporal a miles de inmigrantes, podrían sufrir recortes o imponer condiciones más estrictas, dejando a muchas personas sin opciones claras para regularizar su estatus.
“Estas políticas generan un ambiente de mayor incertidumbre para quienes dependen de vías migratorias convencionales, lo que obliga a los inmigrantes a explorar alternativas menos convencionales pero igualmente válidas”, afirma Rosales.
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Entre estas alternativas, el experto destaca las visas orientadas a emprendedores y a individuos con habilidades excepcionales. La visa O-1, diseñada para aquellos que han logrado reconocimientos significativos en campos como las artes, las ciencias, los negocios o los deportes, se presenta como una opción estratégica en un entorno migratorio desafiante.
“Pese a su enfoque restrictivo, la administración Trump también busca atraer a personas que puedan contribuir al desarrollo económico y cultural del país. Esto convierte a la visa O-1 en una herramienta poderosa para quienes pueden demostrar su talento y reconocimiento internacional”, concluye Rosales.
Esta información se construye con el apoyo de Forero Serrano Comunicaciones.